EL LADO BRUSCO

Fabricio Brusco

En el año 2012, la Federación Mexicana de Fútbol (FMF) anunció dos cambios en el fútbol nacional: el primero consistió en la separación de la Federación y la Liga, dejando así que esta se manejara aparte, sin una injerencia directa de la FMF. El segundo fue la vuelta del torneo de Copa a los calendarios del fútbol mexicano, la famosa Copa MX.

La Copa MX inició con grandes expectativas de todos, parecía muy interesante volver a tener un torneo que pusiera a competir a los clubes del ascenso con los de primera, sin embargo, el formato de la misma es algo que siempre se ha puesto en cuestionamiento.

En un principio se decidió que se iban hacer dos torneos de copa por año y que ciertos equipos, tanto de primera división como de ascenso, no participarían por mal lugar en la tabla general o por estar clasificado a torneos internacionales. Esto resultó sumamente controversial, ya que si vemos los torneos de copa exitosos como la Copa Italia, FA Cup o la Copa del Rey notaremos que son torneos anuales y donde participan absolutamente todos los equipos de todas las divisiones.

A partir del apertura 2019 se cambió esto para tener, como era lógico, una copa de carácter anual y no una por cada semestre del año. No obstante, esto nunca fue lo peor; lo más sorprendente es que la Copa MX ha contado desde su regreso con una fase de grupos, lo cual resulta sumamente extraño, ya que las copas nacionales suelen ser en un formato de eliminación directo, ya sea en las anteriormente mencionadas de Europa como en la de otros campeonatos latinoamericanos como son la Copa do Brasil o la Copa Argentina.

A veces da la impresión de que la Copa MX se hizo como un torneo de relleno, como un torneo que realmente no le importa a nadie: ni a los organizadores, ni a los directivos ni a los jugadores. Sorprende que incluso los equipos del ascenso usen suplentes cuando juegan contra los equipos de primera, ya que eso muestra que para ellos también es un torneo de segunda importancia; cosa que claramente no debería suceder, ya que tendría que ser la oportunidad de estos conjuntos de menor exposición de mostrarse ante una cantidad más grande de público.

La idea de la Copa debería ser enfrentar a equipos de varias categorías distintas, darle la oportunidad a equipos más chicos de mostrarse ante equipos de mayor jerarquía o generar las condiciones para que futbolistas de equipos más chicos puedan tener mayor exposición; en cambio, aquí en México da la impresión de que este torneo se hace pura y exclusivamente para tener más encuentros al año, sin absolutamente ningún objetivo en específico.

@bruscofabricio

Zona de los archivos adjuntos