MUNDO INVEROSÍMIL
 
Carolina Zepeda
@carozpeda

A veces pensamos que se necesitan nuevas leyes para sacar adelante al país, pero, esa no es la solución. Si no se cumplen las leyes que ya tenemos establecidas, ¿cómo podemos garantizar que las nuevas serán acatadas? En México, el incumplimiento de nuestras leyes es un problema grave.

El artículo 128 de la Constitución Mexicana dicta lo siguiente: “Todo funcionario público, sin excepción alguna, antes de tomar posesión de un cargo, prestará la protesta de guardar la Constitución y las leyes que de ella emanen”. Los funcionarios públicos son quienes deben velar por nuestra Constitución, y sin embargo, a pesar del juramento que hacen antes de tomar el cargo, son los primeros en romper la ley.

Como mexicanos y como ciudadanos de una República democrática tenemos el derecho y el deber de exigirle a los funcionarios públicos que cumplan y hagan cumplir la ley porque de lo contrario ellos no están haciendo bien su trabajo.

Es hora de que las personas en cargos públicos cumplan con su deber, pero también es hora de que nosotros, como mexicanos, asumamos nuestra responsabilidad ciudadana y hagamos nuestro trabajo: exigir al gobierno y a sus funcionarios que respeten la Constitución y sus leyes derivadas.

Después de todo, somos el pueblo y tenemos el poder de quitarlos del cargo si no cumplen con sus responsabilidades. No nos hacen falta leyes, nos hace falta cumplir las leyes que tenemos.