México (Xinhua) – La Procuraduría General de la República (PGR) y los padres de los 43 normalistas desaparecidos de Ayotzinapa, acordaron trabajar en un plan de búsqueda usando tecnología de punta.

En una reunión, la procuradora general de la República, Arely Gómez, dijo a los familiares que la PGR tiene como una prioridad investigar los hechos registrados el 26 y 27 de septiembre de 2014, cuando los estudiantes de la normal rural de Ayotzinapa desaparecieron tras ser raptados en la municipalidad de Iguala.

Ambas partes acordaron que trabajarán en un mecanismo para buscar a los normalistas mediante tecnología de escaneo láser desde el aire, conocida como Sistema Lidar, y cámaras de fotogrametría, expuso la fiscalía federal en un comunicado, aunque no precisó los sitios donde se llevará a cabo este rastreo.

En el encuentro sostenido en la sede central de la PGR, en la Ciudad de México, la procuradora reiteró que las investigaciones se llevan a cabo atendiendo observaciones y recomendaciones formuladas por el Sistema Interamericano de Derechos Humanos y la oficina del ombudsman nacional, añadió la fiscalía federal.

Por su parte, el vocero de los padres de familia, Felipe de la Cruz, manifestó que en el encuentro reiteraron su demanda de que el director de la Agencia de Investigación Criminal, Tomás Zerón, deje su puesto porque, a su consideración, ha alterado indicios dentro de la indagatoria.

De la Cruz afirmó que también desconfían de las pesquisas porque la fiscalía federal no ha compartido con sus abogados información sobre dos personas recientemente detenidas por el caso, ni tampoco ha abundado, según ellos, en una línea de investigación relativa al uso de los celulares de varios estudiantes tras su desaparición.

La reunión, que se prolongó por tres horas, fue la primera que sostienen los padres con la procuradora después de que en abril concluyó la asistencia de un grupo de expertos independientes, avalado por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), en la indagatoria.

“Hoy en esta nueva etapa que se empieza junto con la Procuraduría de seguir en el proceso de investigación, debido a que ya no están los expertos independientes, más que nada la exigencia de nosotros como padres de familia es que sea con verdad”, advirtió el vocero a periodistas a su salida de la reunión.

La hipótesis de la PGR en torno a los estudiantes es que fueron raptados por policías corruptos de la municipalidad de Iguala, que los entregaron a miembros del grupo criminal Guerreros Unidos bajo la sospecha de que se trataba de integrantes de una organización rival.

Conforme a presuntos criminales detenidos por el caso y un estudio pericial, integrantes de Guerreros Unidos habrían asesinado y cremado a los jóvenes en un basurero de la vecina municipalidad de Cocula.

No obstante, los padres de los normalistas rechazaron la hipótesis porque dos estudios forenses llevados a cabo por expertos de la CIDH y del Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF) concluyeron que el 27 de septiembre no pudo registrarse un fuego capaz de calcinar a los jóvenes en el basurero.