México (Xinhua) – Guns N’ Roses reunió en la Ciudad de México a más de 65,500 almas dispuestas a corear sus grandes éxitos la noche del martes, durante la primera de dos presentaciones de la agrupación estadounidense en el país.

La banda de rock surgida en los ochenta hizo una escala en la Ciudad de México para brindar la cuarta fecha de su gira “Not In This Lifetime…”, que reúne por primera vez en 23 años a tres miembros de la alineación de su época dorada: el vocalista y fundador, Axl Rose, el guitarrista Slash, y el bajista Duff Mckagan.

Guns N’ Roses no hizo esperar de más a sus fanáticos mexicanos y puntual inició a las 21:30 horas locales su show en el Foro Sol, con el tema “It’ s So Easy”, de su primer álbum “Appetite for Destruction”.

La emoción de los mexicanos no se vio disminuida por el hecho de que Axl Rose tuviera que cantar sentado en un “trono del rock”, debido a que se fracturó el quinto metatarso del pie izquierdo durante un show sorpresa en Los Angeles previo al inicio de su gira de reunión, el 8 de abril, en Las Vegas.

Por casi 150 minutos, la agrupación fundada en Hollywood, California, repasó su historia musical contenida en seis álbumes de estudio ante los miles de seguidores, muchos de los cuales la habían visto en sus primeras presentaciones en México, en 1992 y 1993.

Los 65,500 asistentes, según los organizadores, corearon los grandes clásicos que marcaron a generaciones crecidas en los ochenta y noventa, como “November Rain”, “Welcome To The Jungle”, “Sweet Child O’ Mine”, o “Knockin’ On Heavens Door”, un cover del músico Bob Dylan.

Tampoco faltaron “Civil War”, “Live And Let Die”, “Estranged, “This I Love”, “Patience”, y, al final, “Paradise City”, uno de sus mayores éxitos.

La Ciudad de México es la única parada de la gira “Not In This Lifetime…” fuera de Estados Unidos, una situación que provocó que los boletos de las dos presentaciones se agotaran en cuestión de horas.

Guns N’ Roses irrumpió en la escena del rock de Los Angeles en 1985 y dos años después lanzó su álbum debut “Appetite for Destruction”, del cual vendió 30 millones de copias a nivel mundial, según la empresa organizadora de sus presentaciones en México.

Además, “Use Your Illusion I” y “Use Your Illusion II”, álbumes editados en 1991, le valieron a la banda californiana sendos discos de platino por las altas ventas.

Sin embargo, la fama mundial que alcanzó con esos materiales terminó por generar roces entre los músicos y sólo dos años después, en 1993, la alineación de la agrupación sufrió una paulatina desintegración hasta que Axl Rose quedó como el único sobreviviente de su época dorada.