EL LADO BRUSCO

Fabricio Brusco

Definir a Maradona como jugador, debe ser una de las tareas más complicadas para cualquier futbolero. Diego es de los pocos jugadores de la historia que supo sobreponerse a cualquier reto futbolístico que se le puso por delante; lamentablemente, de su etapa como entrenador no podemos decir lo mismo.

Diego ha dirigido a cuatro equipos y una selección, nunca ha logrado conseguir un título; lo más cerca que estuvo de eso, fue con su último equipo de los Emiratos Árabes, donde estuvo muy cerca de lograr el ascenso. Este sábado, Maradona llegó a Sinaloa para asumir en su quinto reto como entrenador, Dorados de Culiacán. Viendo sus resultados, es fácil notar que no se lo trajo por sus logros como entrenador, aunque claro, Dorados tampoco puede aspirar a tener a Mourinho en el banco.

El problema no son los pocos logros de Maradona o los pocos equipos en los que ha estado, el problema es que como quedó demostrado en el pasado mundial, Diego está más para la polémica o el show, que para temas futbolísticos; tanto es así, que cuesta recordar el nombre de los dos últimos equipos en los que estuvo Maradona, mientras que es muy fácil recordar dos escándalos recientes en los que haya estado el máximo ídolo de la selección argentina.

Que Diego llegue a Sinaloa para entrenar a Dorados se debe más a lo que puede generar por su sola presencia, que lo que puede aportar en cuestión futbolística; seguramente tenerlo en el banco de suplentes hará que se llenen estadios, que se vendan playeras y que el nombre de Dorados empiece a sonar mucho más, incluso, a nivel mundial; y no es que Maradona no sepa de futbol, por el contrario, seguramente entiende el futbol muy bien, sino no podría haber sido el monstruo que fue dentro del campo de juego, lo que está en duda, es si está en condiciones y sabe cómo trasmitir esos conocimientos a sus dirigidos.

Ojalá que en esta nueva etapa en México, Maradona logre que sus méritos deportivos sean más grandes que sus escándalos fuera del futbol, sin embargo, esto va a ser muy complicado si Diego no se centra al 100% en el futbol, lo cual, por el momento se ve bastante complicado. Sería muy bueno que logre revertir la imagen que ha dado en sus últimos años, que si bien no opaca lo enorme que fue como jugador, si hace que muchos pierdan respeto hacia su persona.

@bruscofabricio