Una victoria ante Nigeria necesitaba la albiceleste para colarse a octavos de final del mundial Rusia 2018.

Ha sido un Mundial sumamente complicado para los argentinos, un empate ante Islandia (debutante en este tipo de torneos), una humillante derrota ante Croacia que complicaba su clasificación a la siguiente fase, el último rival, Nigeria -quien con una victoria no solo calificaba a la siguiente ronda sino que dejaba fuera a la albiceleste-, repitiendo el fracaso de Corea-Japon 2002, donde se quedaron en fase de grupos.

Un pase formidable de Ever Banega combinada con una genialidad de Leo Messi le daban la ventaja temprano en el partido, solo él podía aparecer, sólo el 10 podía regresarle la esperanza a todo un país. Sin embargo, apenas iniciando el segundo tiempo un penal a favor de Nigeria estaba dejándolos fuera, nuevamente… los fantasmas se aparecían en el campo y el 10 desaparecía de la cancha pero a cuatro minutos del final, aparecieron dos jugadores que no se esperaban: Mercado centro a Marcos Rojo que le pego al balón de primera intención y así la única llegada de Argentina al arco nigeriano en todo el segundo tiempo liquidaba el encuentro a favor de la albiceleste ganando con “más corazón que fútbol”.

@DanielPalavici1